Puente de las Herrerias-Nacimiento del Guadalquivir

Hoy nos hemos levantado muy temprano para preparar las cosas ya que volvemos para Sevilla.

A las 7 ya estábamos montados en la bici. Al principio vamos por carretera pero al instante cogemos el puente que cruza el Guadalquivir y pasamos al carril y ha empezar a subir.

La subida es muy continúa sin apenas zonas duras pero a la altura de km. 2 nos pegamos una subida de 2 km. con rampas del 17% que hace que nos empiece a sobrar la ropa. Al llegar arriba hay una bajada que nos da un respiro y vemos un túnel que corta la montaña para que podamos pasar.

Sigue la ascensión con algún que otro repecho pero más suaves. Nos cruzamos con tres ciervos que salen despavoridos al vernos subiendo un terraplén de no menos 5 mts. El camino continua y las rampas igual. Llega un punto donde el carril esta muy deteriorado y decido ir por el filo del camino que suaviza el bote de la bici.

La montaña la seguimos ascendiendo y casi siempre con el ruido del río a nuestro lado menos en un recodo donde contracurvea varias veces y hace que otra vez sea más exigente el tramo.

Ya arriba después de casi 11 km. subiendo bajamos una rampa que nos lleva al Nacimiento del Río Guadalquivir. Nos bajamos de las bicis y andamos junto a ellas un poco hasta un punto donde las tenemos que dejar para seguir andando y llegar al inicio del río grande de Andalucia.

Aunque parezca raro de donde nace no sale agua, ya que va un poco subterránea hasta salir a la luz.

Volvemos a las bicis y nos comemos el bocata que llevábamos.

De regreso desandamos todo el camino pero nos paramos en algunos tramos que tienen unas vistas maravillosas. Al llegar al primer puente que cruzamos esta mañana nos deleitamos con las imágenes que nos da el río.

Volvemos al camping donde nos duchamos y nos volvemos para Sevilla tras otras 5 horas.

DATOS DEL DIA

Distancia: 23.78 km

Distancia con pérdidas: 23.78 km

Ascensión acumulada: 539 mts

Descenso acumulado: 537 mts

Pendiente max.: 17.8 %

Duración: 2:40:02

Tiempo en mov.: 1:45:11

Esta ruta no se podría haber hecho si no fuera por tres personas. Mi mujer Merchi que me ha dado unos días para mí sin pedirme nada a cambio, mi hija Lucía que siempre la he tenido en mi recuerdo y que es la que me ha hecho pedalear más rápido para volver a verla, y Julián que es mi amigo de rutas en bici ya que sin el no creo que hubiese terminado ninguno de nuestros viajes. A todos mil gracias.

Video de la ruta

Camping Llanos de Arance-Vadillo Castril

Demasiado temprano nos hemos levantado. A las 6 sonó el despertador pero era de noche todavía. Así que esperamos un poco. Recogimos y montamos las bicis y nos fuimos al Nacimiento del Río Borosa. Hemos ido por carretera buscando un sitio donde desayunar pero ha sido imposible . El camino es en subida pero soportable.

A la altura de la Torre del Vinagre sale el desvío hacia el nacimiento. Es una bajada fuerte para después de pasar el río Guadalquivir cerca de su confluencia con el Borosa, subir un poco. En este tramo nos hemos encontrado con un ciervo en medio de la carretera. Nos hemos estado muy quietos y se ha dejado fotografiar.

Llegamos al inicio del sendero. El río nos acompaña a nuestra derecha en ligero ascenso con muchas fuentes de agua fría donde hidratarse. Pasamos por la unión del Arroyo de las truchas con el Borosa donde es una imagen preciosa.

Seguimos el camino y cruzamos al otro margen y se gira para la izquierda en un cruce ya que el de la derecha es el que deberíamos de coger a la vuelta para subir el Puerto del Calvario, pero por falta de comida hemos cambiado los planes.

Seguimos ascendiendo y llegamos a la Cerrada de Elías. Hay dos variantes: Ir por la Cerrada o bordearla. Decidimos ir por la Cerrada, que es un paraje espectacular que te lleva de un remolino en remolino de agua por un camino estrecho y de vez en cuando cruzando por un puente de un lado a otro.

De vuelta al la pista el camino empieza a coger altura y el carril es pedregoso que a veces te hace ir por el filo para evitar los saltos sobre el sillín.

Seguimos subiendo con las montañas rocosas a nuestro lado y el sonido del río en el valle. Como es tan temprano somos los primeros en llegar a la Central Salto de los Órganos donde atamos las bicis ya que el camino es en tramos casi para escaladores. Vamos cogiendo altura muy rápido. La idea de llegar a los túneles la tuvimos que dejar ya que el hambre era gigantesco y creemos que llegamos a estar cerca.

La subida fue dura por su dureza pero la bajada con zapatillas de ciclista no fue muy agradable. Regresamos a la Central y empezamos a ver a los primeros excursionistas del día. La bajada es rápida pero frenábamos cada dos por tres ya que es un reguero de gente la que sube. A la altura de la Cerrada de Elías cogemos el otro camino que empieza subiendo suavemente para picar hacia arriba con rampas del 12%. Menos mal que es una rampa de 600 mts. si no dejamos el hígado. A mitad de la subida cruzas el Arroyo de los Villares.

Llegamos arriba y empieza la bajada pero en un punto el carril se convierte en un río de agua que te da la sensación de bajar en un parque acuático.

Llegamos al cruce de la Cerrada de Elías y continuamos por el camino que antes nos sirvió para subir al nacimiento. Cogemos agua de una de sus fuentes y al salir hay un bar en donde nos comemos unos bocatas. Volvemos en busca de la carretera y bajamos lo antes subido y subimos lo antes bajado.

Ya en la Torre del Vinagre cogemos dirección Arroyo Frío. Es una carretera estrecha de montaña en ligero ascenso con algún tramo exigente. Pero lo peor fue que al ser sábado hay bastante tráfico.

En Arroyo Frío compramos comida y nos tomamos un tentempié. La carretera da un cambio radical y el ligero ascenso se acaba. Vamos subiendo un puerto de montaña de 4km. con un 7,5% de media pero con rampas del 24%.

Llegamos exhausto arriba. Descansamos un poco y nos vamos hacia Vadillo Castril a finalizar nuestra aventura. Ya a la altura del coche dejamos las alforjas y comemos en una sombra y después de un rato de relax nos encaminamos hacia la Cerrada de Utrero. Tiene un mirador desde el que se ve parte de todo lo subido antes.

Seguimos bajando hacia la Cerrada por una trialera y llegamos a la presa.

Descansamos un poco y volvemos para el coche deshaciendo la trialera. Sin alforjas se nota el cambio por que con ellas no la podríamos haber subido.

Ya en el coche hemos ido al camping y hemos preparado la tienda y bañado y casi como nuevo. Cena y a dormir que mañana es nuestra última ruta.

DATOS DEL DIA

Distancia: 47.37 km

Distancia con pérdidas: 48.16 km

Ascensión acumulada: 1273 mts

Descenso acumulado: 907 mts

Pendiente max.: 24.05 %

Duración: 9:00:41

Tiempo en mov.: 3:39:13

Pontón Alto-Camping Llanos de Arance

Nos hemos levantado a las 7 y hemos desayunado en el bar de anoche. Sobre las 8 hemos salido. Al principio se sube un poco y se ven unos paisajes inolvidables para nuestros ojos.

Una vez llegado al cruce de la carretera vieja con la nueva que va por el Camino de la Ballestera solo en su principio nos hemos pegado 7 Km. bajando a gran velocidad. De nuevo vuelta a subir un repecho de un km. pero bastante exigente.

Y otra vez a bajar durante 4 km. pero esta vez la bajada es mucho más vertical y con curvas de 180º que te hacen disfrutar pero siempre alerta para no irte por el precipio y bajar mucho más rápido. Ya abajo se llanea un poco para seguir bajando hasta el puente que cruz el Arroyo de la Cuesta de Escalera.

Ahora toca subir 2 km., el primero realmente duro y el siguiente la dureza es que vienes cascao del anterior. Llegamos al mirador de los Vallejos donde se aprecia el Embalse del Tranco de Beas que va a ser nuestro compañero de fatigas del día de hoy.

Ya en Hornos hay una rampa "infernal" de las que al llegar arriba notas como están tocando tambores pero no, es tu corazón. Hornos es un pueblo bonito pero para ir en coche.

En el pueblo hemos buscado embutidos y pan para la comida que nos va a pillar en terreno de nadie. Nos hemos tomado unas cocacolas en un bar y nos hemos lanzado cuesta abajo hacia el embalse por un carril rodeados de olivos. El carril tiene gran pendiente y roderas de los tractores que te hace estar alerta.

Abajo hemos llegado a una carretera y hemos cambiado los olivos por los pinos. Siempre vamos por el lado Este del embalse y el terreno es un tobogán continúo. La sensación de pedalear a pocos mts. del agua y las vistas de una ardilla y un ciervo hace de este camino una experiencia visualmente increíble. Al pasar los km. hemos visto un merendero donde hemos atado las bicis y bajado al embalse. La calor ha hecho que ni me lo piense.

Volvemos a arrancar más fresquito y los toboganes siguen en nuestro pedalear pero de repente hay una subida de un km. al 10% que te deja chorreando en sudor. Ya estamos en el Higuerón.

En este tramo el carril desaparece y empezamos a ir campo a través solamente guiados por el track ya que solo hay hierbas y árboles pero más o menos ciclable.

Pero más adelante el estrecho carril es solo para empujar las bicis por unos terraplenes al estilo La Canda. Julián ha pinchado y la solución ha sido empujar mi bici a una zona más fresca y volver a por la suya.

Ha arreglado la bici y el camino ha empeorado más todavía. Los árboles estaban caídos cortado el paso y la solución ha sido pulsear las bicis para pasar al otro lado.

Hemos comido ya que la calor y el agotamiento del esfuerzo nos pedía comida. Después al volver a pedalear la calor es insoportable y el camino ha mejorado pero esta lleno de piedras sueltas. El agua escasea como ayer. A lo lejos vemos unos caballos desbocados cuesta abajo pero al acercarse vemos que lo que hacen es transportar los árboles cortados desde lo alto de las cumbres hasta cerca del camino.

La idea es coger agua de donde sea, y si tenemos que bajar al embalse pues se baja. El camino gira 90º a la izquierda y se ve como el camino nos lleva al Arroyo Montero donde me descalzo y cruzo a la otra orilla y al girarme veo a Julián dentro del agua.

Cuando salió del agua se dio cuenta que la cámara de fotos y el móvil no son acuáticos. Y claro no le iba a hacer el feo de no acompañarle.

Incluso he bebido de esa agua que no se debe de hacer pero estaba deshidratado. Volvemos a las bicis y el carril lo abandonamos por otro que mejora un poco. Llegamos a un puente que se ven unas cascadas y tenía una especie de fuente de la que Julián bebió pero a mi no me daba buen rollo ya que tenía un pez en la pila.

Más adelante hemos llegado a una verdadera fuente de agua fresca. Hemos bebido y recargado. El camino sigue toboganeando hasta a falta de 6 km. donde hay un repecho de un km. con rampas del 12%. Arriba en el mirador hemos visto el río en un valle.

Bajamos como locos y por fin llegamos al camping. Montamos la tienda, nos duchamos y nos tomamos unos refrescos antes de la cena. En la cena nos hemos pegado un homenaje y para la cama.

La sorpresa ha sido que en cuanto anocheció se acerca unos jabalíes al camping para que la gente les de comida. Resulta curioso intentar dormir con lo gruñidos.

DATOS DEL DIA

Distancia: 60.26 km

Distancia con pérdidas: 60.73 km

Ascensión acumulada: 1015 mts

Descenso acumulado: 1729 mts

Pendiente max.: 26 %

Duración: 9:04:22

Tiempo en mov.: 4:02:25

Vadillo Castril-Pontón Alto

A las 6,45 sonó la alarma y mientras nos vestimos y lavamos, recogimos la tienda. Nos montamos en el coche y nos fuimos para Vadillo Castril. Es una pequeña aldea donde hemos decidido dejar el coche durante 3 días.

Sacamos las bicis, nos echamos crema y salimos. El inicio es durillo por que nada más pasar el puente del embalse de la Cerrada de Utrero comienza la carretera que nos ha de llevar a la Nava de San Pedro. Son 8 km. subiendo la primera parte por carretera y después por carril.

En un momento de la subida escuche un ruido y vi dos ciervos corriendo cuesta abajo. Tardamos poco más de una hora en subir la montaña. Respiramos un poco y disfrutamos de las vistas.

Y bajamos a gran velocidad hacía la Nava de San Pedro. En la bajada pasamos frío en los tramos sombríos pero al llegar a la Nava nos espera un restaurante donde tiene la tostadora estropeada pero nos comemos un bocata de jamón, tomate y aceite de la tierra.

Intentamos arreglar los problemas del cambio de mi bici pero no tiene solución, así que me quedo sin el piñón grande ya que me roza bastante en el desviador de platos. Total todavía me quedan 7 piñones más.

Volvemos como a subir 12 km. pero más tendidos. Las vistas siguen siendo maravillosas.

En el Gps llevo unos waypoints de fuentes para recargar agua pero están todas secas. Nos cruzamos con un coche de la Junta de Andalucia y nos comenta que en el paso de la Rambla Seca hay agua. La calor es grande y el agua nos escasea y esperamos no ser nosotros los siguientes.

Seguimos subiendo y vemos unos abrevaderos en otro lugar al que nos indicaron. Cogemos agua súper caliente pero agua en definitiva. Enfrente hay la sombra de un gran árbol donde comemos y me relajo un poco.

Seguimos y por fin llegamos al Control de la Rambla Seca. Lo cruzamos y nos encontramos unos abrevaderos para animales de los que sale agua hirviendo. Nos avituallamos y ya estamos en los Campos de Hernán Pelea (bueno sobre el nombre hay muchas disputas de si son Perea o Pelea, pero yo me decanto por este último). Es una planicie a 1600 mts. de aspecto lunar, así que los escépticos con que si Neil Alden Armstrong pisó la Luna, si ven estos parajes creerán que el alunizaje no sucedió.

Al principio hace un poco gracia ver esta zona tan árida sin árboles pero después de los km. subiendo toboganes de piedras, con la calor que hace y racionando el agua que llevamos por si acaso, terminas bien harto de los Campos. El camino va por el GR-144 hasta que en un cruce lo abandonamos. Los toboganes ahora son paredes que te toca tirar de riñones en las subidas y en las que las bajadas vas casi más despacio que subiendo por que no puedes dejar de tocar los frenos. El carril está destrozado como una trialera y estamos de toboganes hasta ... (omito la palabra por si un menor lo lee).

Seguimos en nuestro viaje cuando llegamos a otro punto donde volvemos al GR-144. Nuestro pensamiento es que no lo debíamos de haber abandonado, ya que por un instante el camino mejora pero después vuelve por sus fueros. Ahora las bajadas son más continuas pero hay algún repecho que te obligan a empujar. Arriba de ellos solo te queda que respirar y beber un poco.

Llegamos a una bajada fortísima que nos lleva a una zona más llana y de mejor carril, donde por fin vuelve a haber árboles.

Es como si volviéramos al P.N. de Cazorla, ya que los Campos no dan sensación de ser de allí. Bajamos a gran velocidad. Abajo del todo está el Nacimiento del Río Segura.

Bebemos toda el agua del mundo y más. ¡Que fresquita! Seguimos el camino siguiendo el track, pero no merece la pena es más recomendable ir por carretera. Pasamos el pueblo de Fuente Segura de Abajo y nos metemos en un carril pegado al río que nos lleva a Fuente Segura de Arriba que el nombre del pueblo no tiene mucho sentido, ya que a la salida hay una rampa que en su 1ª parte se puede subir pero en la 2ª es imposible no empujar. Ya arriba pensé que estaba en Fuente Segura de más Arriba.

En este punto enganchamos con la carretera que debíamos haber cogido antes. Viene una fuerte bajada que lleva a Pontones. Aquí nos hemos liado por que el track estaba mal y hemos vuelto a la carretera a coger la carretera de Pontón Alto. Es en ascenso pero la cercanía de la casa nos espolea a seguir pedaleando.

La casa donde hemos estado es la Casa Rural Micaela que es una maravilla. Es una casa muy fresca que con la calor que traíamos se agradecía, pero después de la ducha hacía frío. Fuimos a cenar y de vuelta a la casa donde hemos dormido con dos mantas. Increíble.

DATOS DEL DIA

Distancia: 59.79 km

Distancia con pérdidas: 60.73 km

Ascensión acumulada: 1446 mts

Descenso acumulado: 1058 mts

Pendiente max.: 16.6 %

Duración: 9:42:56

Tiempo en mov.: 5:02:18

Montequinto-Puente de las Herrerías

Por fin llegó el día de la escapada. Esta mañana he trabajado pero he salido un poco antes y me ha venido de maravilla. Me he arreglado, comido y a esperar a Julián.

A las 3 me ha llamado y mientras bajaba los bultos y la bici y me he despedido de Merchi y Lucía nos han dado las 3,20. Del viaje en coche no hay nada que reseñar, excepto que está muy lejos, y a las 8,10 hemos llegados jartitos de coche y carretera. Hemos montado la tienda y cenado, y cerca de las 10 como estamos muy cansados nos hemos acostado.

En el camping hay un grupo de escolares que se lo han pasado en grande, ya que a las 10 ha empezado la discoteca. Nos iba a dar algo. Era imposible dormir. Como a la media hora ha llegado una autocaravana que han aparcado al lado. Buen aparcar no lo tengo claro. La conversación era:

Hombre: - Dime que hago.

Mujer: - Para atrás.

H: - Para atrás que es? Para tí o para mí.

M. - Para tí es para adelante y para atrás es para mí.

Encima la niña chica también ayudaba a su manera en el aparcamiento diciendo lo mismo que la madre. Ya no pudimos más y empezamos a reirnos a carcajadas.

Sobre las 12 se acabo la discoteca y pudimos dormir. La verdad es que no he dormido bastante bien, ya que el suelo esta muy duro y en una de estás Julián se levantó para ir a los servicios y como la noche era cerrada no los encontró y decidio ir al río que estaba enfrente pero lo que no se acordaba que había una valla que se la comió enterita.